23 abril 2008

La vida en pareja te da sorpresas

Por: Enrikín.

Las historias de pareja son casi siempre secretas, de a dos, a menos que los susodichos se separen y cada uno por su lado después andan dejando mal al o la otro/a. Pero este no es el caso.

La siguiente historia la escuché en un bar, en momentos en que tres amigos confesaban sus aventuras sexuales más turbias. Por lo que me pude dar cuenta los tres pasteles eran casados, pero entre ellos se notaba una amistad de años por la confianza de sus relatos. Nunca se percataron que en una mesa a lado de ellos otro pastel con orejas de radar escuchaba sus tonteras.

La verdad es que no contaban nada nuevo respecto de lo que conversamos entre amigos. Hasta que uno de ellos hizo una pausa de esas “amigos míos me enamoré…”, pero fue para hacer una descabellada e hilarante confesión.

El tipo empezó relatando que en los pocos años de matrimonio había logrado un gran fiato con su esposa. Tenían mucha confianza y siempre trataban de hacer cosas nuevas en la intimidad.

Pasaban así sus momentos maritales hasta que en una oportunidad ambos estaban conversando en la cama, sólo con ropa interior y pasó algo gracioso, por lo que los dos comenzaron a reír.

Todo iba a bien, hasta que la mujer se para de la cama y, aún riendo, se agacha a recoger algo, acto en que se le cae un sorpresivo gas, el que además salió con un resto de challa. Tal situación provocó que la risa de su pareja se transformara en un ataque de carcajadas de esos que no pueden parar.

El tipo cuenta que su mujer tiene muy buen humor y que además es más caliente que diablo con tifus. Tras la graciosa escena la mujer dijo que iba a ordenar la ropa del suelo y la llevaba a lavar. Pero para sorpresa del sujeto la graciosa mujer le lanzó el siguiente desafío:

-En el baño me quitaré las pantaletas cagadas ¿Serás capaz de olerlas?

-jajaja… tú eres weona, nunca tan cochino…

A lo que la desafiante mujer le responde. –Jamás pensaría que por oler los calzones cagados de la mujer que amas seas un cochino. Además, hay olores que por desagradables que sean, pueden lograr excitar a hombres y mujeres.

El tipo comenzó a justificarse ante sus amigos. Que se había calentado con el desafío, que mientras su mujer le hablaba había tenido una erección, que había sentido curiosidad y sus amigos lo empezaron a webiar, porque ya sospechaban para donde iba la historia.

El tipo sigue con su relato. Mientras mi linda mujer estaba en el baño siguió con su acoso sexual.

Ya poh, ven a oler mis cagados, me decía del baño. Además estoy desnuda así que podría ser interesante. Me amenazaba la loca.

-Ya poh amor, también están olorositas a sudor ¡Ummm, que rico huelen, son excitantes!

De pronto entra completamente desnuda ala habitación y me tira los colzones cagados a la cara. Quedé pa´entro, no sabía si enojarme o reír. Me pilló de sorpresa. Yo agarré de forma inconciente los calzones. Mientras ella hizo un movimiento de baile erótico en la puerta de la pieza.

No van creer won, mientras miraba a mi mujer no pude evitar ver los calzones cagados y me empecé a calentar. De pronto y sin siquiera pensarlo, acerqué la prenda cagada a mi nariz y comencé a olisquerla. Era una mezcla de heces, orina y sudor.

Para gran sorpresa mía, algo que a cualquier mortal le provocaría un asco vomitivo en circunstancias normales, incluso a mí, en ese momento me producía una reacción de placer que no puedo explicar, fue tanta la calentura que me fui sin siquiera sacar la tula del calzoncillo.

Ni siquiera me di cuenta que mi esposa se estaba duchando. Cuando llega a la cama me pregunta qué me pasa y le cuento de la eyaculación que tuve con los sus olores naturales. La respuesta de ella fue un ataque de risa y terminamos teniendo uno de los mejores follones de nuestra relación.

Ahora, cada vez que quiera felpearla, voy a la ropa sucia y busco sus calzones para excitarme. Estoy cagado weón, me gusta oler su caca, me calienta, me vuelve loco. Y como complemento provoca que tenga las mejores escenas de sexo con mi mujer… y todo gracias a unos calzones con frená de camión.